lunes, 23 de noviembre de 2009

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debate

“La represión y los Derechos Humanos en el Chaco”

Jueves 26/11 - 18 hs.

Aula 9 -Facultad de Humanidades.

Con la participación de:

· Organismos de Derechos Humanos

· Movimientos Sociales

· Medios de Comunicación Alternativa

Invita: Cátedra Libre sobre Cambio Social

AULA 9 - Facultad de Humanidades - UNNE (Av. Las Heras)

miércoles, 18 de noviembre de 2009

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Hace no mucho tiempo tuvimos la gran oportunidad de escuchar en Resistencia a uno de los intelectuales más importantes que tenemos enn el país. Él, como tantos otros intelectuales de la Argentina, participa del movimiento llamado "Carta Abierta". La mayoría de nosotros conocimos a este grupo en el tan "renombrado" conflicto "campo-gobierno". una de las satisfacciones que trajo consigo la aparicion de Carta Abierta, más allá de sus reinvindicaciones, fue la gratitud de ver como los intelectuales comenzaron a mostrar sus líneas en la política actual, después de mucho tiempo se redefinía participativamente en lapolítica y lo hacían saber al pueblo.

Sin embargo, luego de aquel conlflicto campo-gobierno que nunca terminó, muchos de nosotros no hemos escuchado, ni leído a Carta Abierta apoyando la lucha social.
no los hemos visto, oído, ni leídos, debatiendo y pelando por el desastre de Tartagal, tampoco en la epidemia del Dengue y aún no los encotramos en ningún repudio por la crisis sanitaria (miles de personas padecen Mal de Chagas en el Chaco) el hambre y la desocupación que hay en nuestra provincia.

Más de mil personas caminaron durante cuatro días, desde el interior de la provincia, para hacer escuchar el hambre y la pobreza en la que viven. 1.500 personas más los recibieron el pasado 5 de agosto en una enormísima columna, donde obreros, campesinoes, indígenas y estudiantes marcharon hasta la Plaza 25 de Mayo para gritar "no más desocupados, no más muertes por desnutrición".

En la editorial de este número, buscamos un "grito abierto". Porque próximos a cumplir un año de edición no nos sentimos ajenos a la triste situación que se esta viviendo hoy en día. Sin embargo por otro lado tenemos guardados bosquejos esperanzadores, porque son tiempos de unión, de fuerza de lucha, de reivindicación.

Como diría nuestro estimadísismo Eduardo Fracchia, son tiempos de una "filosofia de la resitencia, inquisitiva (...) una filosofía sin recetas ni dietas intelectuales, construyendose palmo a palmo, trabajosamente, sin conseciones. Filosofar así es vivir. Y vivir de esta forma es resistirse al sometimiento o a la exclusión con el mismo énfasis con que nos resistimos a la muerte".
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Vidas que valen, la Peña.


Nos pasamos el tiempo rejuveneciendo, vivimos de la muerte de esas células para rejuvenecernos. Morimos porque rejuvenecer es sumamente cansador. ¡Rejuvenecer es matador! Por eso, desgraciadamente nos morimos. Nos morimos de vida.
Edgar Morin, La cabeza bien puesta. repensar la reforma, reformar el pensamiento.


Yo no aspiro a que me babeen la tumba de lugares comunes, ya que lo único realmente interesante es el mecanismo de sentir y pensar.
¡Prueba de existencia!
Oliverio Girondo, Espantapájaros.

(Ilustración - Horacio Silvestri)


Fue en el 2004, me acuerdo. A Martha Bardaro recién la estaba conociendo cuando dictó un curso sobre pensamiento complejo de Edgar Morin.
Quizás para espantarla, decidí terminar mi Trabajo Final no con reflexiones sesudas sobre el epistemólogo complejo, sino con una referencia muy concreta a Fernando Peña. Sabía lo irritante que pdía caer- y todavía cae- a las personas, digamos, no acostumbradas a ese tipo de humor: cáustico, bizarro, borderline. Y lo que le escribí fue más o menos esto:


"En el momento en que escribo estas páginas, un artista irrepetible e irritante cronopio llamado Fernadno Peña sufre una recaída acaso grave de algo que comienza como gripe pero que desemboca en pulmonía, tal vez en algo peor que todos piensan pero nadie nombra, abandona por propia voluntad la clínica en que lo internaron y escribe una carta a los canales de televisión: "No me alienten", escribe."No me digan: ¡¡aguante,Peña!! No soy un equipo de fútbol".


la gente enferma de sentido coún confunde defensa con apología: si yo defendiera la actitud de Peña (su desición de tomar su propia vida en propias manos), entonces significa que pienso cómo él. lo que convierte esta página en una inmediata apología de la muerte. Sin embargo, es una falacia, una gansada descomunal. Yo no haría esa acrobacia sinr ed que hizo él; pero eso no me impide quererlo así, en esa diferencia radical (radical: porque nos pone frente a la cuetión última que es el morir), abismo que , al separarnos, nos une. ¿O acaso los que no queremos morir, sabemos cómo o para qué vivir? Los que eligen vivir su vida de manera diferente de la mia, ¿viven en el caos, en una intransitable alteridad? Detrás de todo esto, quizás haya una fenomenología del amor. Quiero decir, ¿tengo el valor de "permitir" que Peña- o cualquier persona amada, y recordemos que sólo las personas amadas e mueren- dispongan de su vida como se le dé la regalada gana?


"No me digan: ¡Curate!", escribió Peña. "Ese es un deseo cobarde". Y él, que escandalizó a mi pacato pís con su estridente e incorrecta homosexualidad, nos gritó: "Dejen de llorar, ¡¡maricones!!" Y yo, que escribo las palabras que escribió él, me pregunte qué tiene que ver su canción desesperada acaso pero lúcida, con este curso que dicta Martha Bardaro, con mi Trabajito Dinal sobre el Paradigma de Morin, me pregunta si hay causalidad o bucle, o si esta melancolía será la careta pomposa que elige la muerte de los demás para balbucearme la mía.
Peña nunca fue su profeta, nunca dijo "Ey, ¡¡a suicidarse que se acaba el mundo!!" Ejerció, sí, el inalienable derecho a interpelar la muerte y coquetear con sus heraldos, imperdonable "exhibición de necrofilia" para un país que está de olvido, siempre gris, para una ciudad empeñada en un sistemático deshonrar la vida, en el que la Carrera de Filosofía es un Curso de Adoctrinamiento intensivo y Paulo Coelho es un egregio pensador y vidrios de colores se regalan y esperanzas se compran para dormir mejor. El país de los diputados Porelorti y de los agropanzones VIP como Martin Revoyra Lynch: gente bien.


Cuando partió su compaero, Simone De Beauveoir dijo: A Jean Paul Sartre, no lo volveré a ver jamás. En ningún cielo metafísico nos volveremos a encontrar, porque en el centro de la tiniebla sólo hay eso:más tineiebla. Vivir de muerte. El aletear de la mariposa desencadena tifones en el alma que no alcanzamos comprender. Heráclito resuena en esas palabras de Lorenz, como la carta de Fernando Peña resuena en mis palabras.


Aceptar lo que no se nos parece, la diversidad de lo uno, perdonar la libertad ajena, convivir con la diferencia, esa incertidumbre de lo humano que nos desfonda: esos son los escaándalos de la razón globalizada. Peña, en cambio, en breve retumbará mar adentro.


¿Aprobaría Edgar Morin que Peña retumbre, en breve mar adentro? ¿Qué opinaría él, que sabiamente pudo escribir: "lo inesperado llega. Acaso la apuesta sea esperar lo improbable"? Morin, que escribió que no podremos re-ligar lo disyunto si no estamos disponibles para la compasión, porque "la compasión es una necesidad vital para la proximidad y para nuestra tiera".


Siempre cantamos la misma canción, necesitamos tanto la esperanza paradójica, apostar al sentido. Al igual que esas brechas por las que en la historia lo extraordinario emerge, la mariposa también es otra brecha (la metáfora es de Morin. ?Aprobaría Peña la metáfora de Morin?). Cuando emerge de la crisálida, un instante eterno: el momento de espera hasta que la mariposa pueda abrir sus alas. Ese proceso de desenmascarmiento, lo estamos viviendo por primera vez. ¿Lo estará viviendo también ese actor loco, hormonal, incorrecto, corrosivo, cruel, mezcla de Duchamp y Minujín, mexla de Wilde y Foucault, esa gota de salmuera que no conocí pero que es de manera inexplicable, el espejo de todos los poetas?


Somos pedazos del viaje universal - escribió Juan Gelman, en Roma, en 1980-.

Iremos a parar a cualqueir playa.
Vamos a hacer un fueguita contra el frío y el hambre.


Pasaron 5 años de auqle texto empeñado en hablar de Peña para escandalizar a Bardaro.
(Vamos a vernos, ver).

Ahora Peña (Vamos a arder bajo la misma noche) se murió.

Todo el timpo tengo ganas de llorar.